La Federación Apostólica de Familias es una comunidad católica de matrimonios que, bajo la protección de María y como líderes (dirigentes) apostólicos comprometidos en la transformación del mundo en Cristo, aspiran a la santidad a partir de la fuerza del sacramento del matrimonio, según el carisma del padre Kentenich, nuestro fundador.
Es una comunidad sin vínculos jurídicos obligatorios que corresponde al principio “libertad tanta como sea posible, obligaciones sólo las necesarias y, sobre todo, cultivo del espíritu”.
Junto con el resto de las comunidades de Schoenstatt, asume una responsabilidad solidaria por el Movimiento en su totalidad.