El pasado 7 de octubre de 2023 renovamos como 5º curso de la FAFE nuestra consagración a esta comunidad por dos años. Voy a resumir lo que es en cierto modo obvio y al mismo tiempo hermoso, emocionante y motivo para dar gracias a Dios:
- Estos dos años intensos desde la primera consagración, con el trabajo de curso y la integración en los grupos de la comunidad oficial.
- Nuestra preparación para esta renovación, destacando el regalo de las adoraciones que pudimos tener en el Santuario Original el pasado mes de septiembre y en el Santuario de Serrano la víspera.
- La fórmula de la renovación, tan potente y al mismo tiempo tan llena de sentido.
- El acompañamiento, el cariño, los regalos y la celebración de toda la Comunidad y de otros hermanos de las otras ramas, hijos, familia y amigos. Sin duda, “suculenta” como los cactus que nos regalaron.
7 de octubre de 2023
Pero me quiero detener en el punto clave de la homilía de nuestro querido Padre José María: somos el curso Sembradores de Esperanza, y para poder llevar a cabo nuestra siembra lo primero es el CULTIVO DE NUESTRO MATRIMONIO. Y es que yo creo que a veces se nos olvida que nuestro matrimonio es un sacramento, que Jesucristo está con nosotros en todo momento, que la fuerza del Espíritu Santo se derrama sobre nosotros a través de nuestro cónyuge y que de nuestro amor matrimonial, que viene de lo «Alto», surge la fuerza para construir la familia, el curso, la comunidad la Iglesia, los apostolados y todo aquello que esté en los planes de Dios.
Tenemos por delante dos años hasta la siguiente consagración con dos grandes retos: profundizar en nuestra formación y discernir la voluntad de Dios con la perspectiva del Poder en Blanco. Contamos con vuestras oraciones.
Ideal del 5º curso: Comunidad de familias, hijos fieles del Padre, en María, vinculados a su Santuario, Esperanza para un nuevo tiempo.
PD: Como somos un curso que se caracteriza por disfrazarse de gente recia, libre y sobrenatural para esconder que somos unos sentimentales cursis y pasteleros, os invitamos a cultivar vuestro matrimonio sentándoos juntos en el banquito que hemos donado al Santuario, a la sombra del almendro que plantamos en nuestra primera consagración. Es monísimo, casi ideal.
Otras noticias de interés: